los cuatrocientos golpes

Los cuatrocientos golpes

Los cuatrocientos golpes (Les quatre cents coups) es la primera película de François Truffaut, dirigida en 1959, y una de las primeras referentes, y también más influyentes, de la corriente cinematográfica francesa llamada Nouvelle Vague.

los cuatrocientos golpes posterTambién es la primera película en la que aparece Antoine Doinel, alter ego del director, y que siempre fue interpretado por el mismo actor, Jean-Pierre Léaud, durante más de veinte años, hasta El amor en fuga.

Los cuatrocientos golpes debe su título a una frase hecha en francés, que se refiere a algo así como hacer muchas tonterías, aunque también se ha dicho que puede tener un doble sentido por los golpes de la vida que va recibiendo el protagonista. Y es que, en el fondo, Antoine da y recibe, recibe y da, en una infancia que no es la más fácil ni cómoda para un niño de su edad. Su relación con sus padres, en el colegio, y con la vida en general, es consecuencia de unas circunstancias de las que no es culpable, pero que le acaban trayendo otros problemas encadenados. Cierto es que Truffaut tampoco tuvo una vida fácil, y eso es lo que transmite de manera tan realista y cruda en la película.

Aunque ésta fuera su primera obra como director, su experiencia laboral y su formación teórica en el séptimo arte le dieron un empaque muy sólido a Los cuatrocientos golpes. Y más aún con la tremenda recepción que tuvo en su estreno, con una gran afluencia de público y también con muchos reconocimientos en forma de premios y nominaciones.

los cuatrocientos golpes

Y, para qué negarlo, actualmente es una película reconocida como un gran clásico por los críticos más formales, y también como un título de culto por las nueva generaciones de cinéfilos. Fue una película innovadora en su tiempo, distinta y potente, y lo sigue siendo hoy en día. Como muchos de los grandes títulos, éste ha conseguido mantenerse en plena forma con el paso del tiempo, y han sido muchos de los profesionales del cine, como Lester, Buñuel o Kurosawa los que la han citado como uno de sus títulos favoritos.

Nosotros seguiremos viéndola y disfrutándola como Antoine disfruta del mar. Y nos seguiremos sorprendiendo mirándola, hasta ese momento final en el que Antoine es el que nos mira a nosotros. Uno de los planos más famosos de la historia del cine, para cerrar una de las películas más importantes de su historia.

Un comentario

  1. Un gran ejemplo de película, para dar a entender que cuando alguien se propone hacer «cine» y es un apasionado de este arte, lo consigue con mayúsculas. Gran película y buenas observaciones con lo del título de la cinta que por cierto desconocía. Saludos Rubén.

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